Cómo cambiará la economía mundial tras la llegada de Trump a la presidencia estadounidense?

La victoria de Donald Trump en las elecciones de Estados Unidos de 2024 ha sacudido el panorama económico mundial, generando incertidumbre y obligando a los principales actores globales a prepararse para un nuevo ciclo marcado por el proteccionismo, los aranceles y una política económica enfocada en beneficiar a Estados Unidos a expensas de sus socios comerciales. Su regreso a la Casa Blanca trae consigo una versión renovada de su agenda "Make America Great Again" (MAGA), con medidas que afectarán especialmente a la Unión Europea (UE), China y países emergentes, repercutiendo también en la economía local de España, con un impacto directo en el mercado inmobiliario y la inflación.

Uno de los pilares de la política económica de Trump es el aumento de los aranceles a las importaciones. El presidente electo ha prometido gravar los productos procedentes de China con tasas de hasta el 60%, los de México con un 100% en casos extremos y los de la Unión Europea con un 10%. Este proteccionismo, que busca proteger la industria estadounidense y equilibrar la balanza comercial, generará fuertes tensiones en el comercio global. En particular, la UE, que exportó bienes por un valor de 502.300 millones de euros a Estados Unidos en 2023, sufrirá un golpe significativo, afectando especialmente a países como Alemania, Italia e Irlanda, principales exportadores europeos. La economía española también se verá perjudicada, dado que sus exportaciones alcanzaron los 19.000 millones de euros en el mismo año.

Los aranceles también tendrán un efecto adverso en la inflación global. Luis de Guindos, vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), advierte que estas medidas podrían tener “un impacto perjudicial sobre el crecimiento y la inflación”. La aplicación de aranceles aumentará los costes de producción para muchas empresas europeas y chinas, forzándolas a trasladar estos incrementos al precio final de sus productos. Al mismo tiempo, esta política comercial proteccionista podría desencadenar una guerra comercial global, como ya ocurrió durante el primer mandato de Trump, cuando los aranceles generaron una contracción en el comercio mundial y ralentizaron la economía de países dependientes de las exportaciones.

En el caso de España, la política económica de Trump tendrá consecuencias en el mercado inmobiliario y en el sector hipotecario. Los expertos anticipaban que 2025 sería un año favorable para la vivienda; sin embargo, este escenario ha cambiado. La incertidumbre comercial y el posible impacto en la economía europea podrían llevar al BCE a implementar recortes en los tipos de interés para estimular la economía, lo que abarataría inicialmente las hipotecas. Sin embargo, conforme aumente la inflación debido a los aranceles y la volatilidad económica, los tipos podrían volver a subir, encareciendo las hipotecas y limitando el acceso a la vivienda.

Por otro lado, los efectos de la victoria de Trump no se limitarán a Europa y China. En los países emergentes, un dólar más fuerte, resultado de las políticas económicas del republicano, podrá complicar la situación de su deuda externa, ya que los intereses de los créditos denominados en esta moneda aumentarán. Los analistas de la firma Ebury señalan que los inversores han comenzado a vender masivamente divisas de mercados emergentes, anticipando el impacto negativo de los aranceles, los riesgos geopolíticos y la incertidumbre económica global.

A nivel interno, la economía estadounidense experimentará ciertos beneficios a corto plazo, gracias a los recortes fiscales y la reducción de la regulación que propone Trump. Estas medidas, dirigidas a favorecer a las grandes empresas y a la clase trabajadora, podrían estimular el crecimiento económico. Sin embargo, los analistas advierten que este crecimiento será efímero, ya que el proteccionismo y la inflación podrían frenar el consumo y la inversión a mediano plazo.

Asimismo, sectores como las energías renovables se verán particularmente afectados. Trump ha manifestado su intención de revertir la Inflation Reduction Act, una iniciativa de la administración Biden destinada a favorecer la transición energética con un paquete de incentivos de 450.000 millones de dólares. En su lugar, el republicano apuesta por apoyar a las empresas petroleras, lo que podría ralentizar los esfuerzos globales para combatir el cambio climático.

En conclusión, la victoria de Donald Trump en las elecciones de 2024 marca el inicio de una nueva era económica global, caracterizada por el proteccionismo y la incertidumbre. Las políticas arancelarias de Trump afectarán de manera significativa a la Unión Europea, China y los mercados emergentes, provocando un aumento de la inflación y una posible desaceleración del crecimiento económico. En el caso de España, la vivienda y el mercado hipotecario se verán directamente afectados, mientras que la economía mundial en su conjunto se enfrenta a un escenario de volatilidad y tensiones comerciales que podrían tener consecuencias a largo plazo.